Satyagraha
Ya en el año 1908 Gandhi se percató de que necesitaba un nuevo término para la nueva fuerza que estaba introduciendo en la política. “Resistencia pasiva” era engañosa, y no-violencia, la traducción directa del antiguo término sánscrito ahimsa no estaba todavía en boga (eso ocurriría unos veinte años después). Gandhi sostuvo un concurso y sadagraha o “aferrarse a lo Real” fue seleccionada, pero luego modificada por razones gramaticales a Satyagraha. El gran beneficio de este término subyace en el significado profundo de ‘satya’ en los lenguajes Indios: no sólo ‘verdadero’ en oposición a falso, sino ‘real’ en oposición a irreal (ver su famosa definición al final de este artículo), y ‘bueno’ en oposición a dañino.
El término Satyagraha es usado en dos sentidos: puede significar todo el principio de la no-violencia, o la dimensión activa y resistente de ella, y no solamente la petición de esta o el programa constructivo. Además, hablamos de campañas individuales como la Sal Satyagraha, el Temple Road Satyagraha, o podríamos acuñar el Budrus Satyagraha en Palestina hoy en día. El esfuerzo por los derechos civiles llevados a cabo por varios grupos hoy en día, como la comunidad LGBT, los derechos de la mujer y la autonomía de los indígenas, todos contienen elementos esenciales de Satyagraha en el sentido de que son no-violentos e intentan “hablar la verdad al poder.”
Satyagraha es algunas veces contrastado con su opuesto duragraha ‘aferrarse a lo malo,’ lo cual implica el uso de coerción o fuerza. La metal final de Satyagraha es siempre unir a las personas, acercarlas, y en ese acercamiento el “aferrarse a la verdad” personal uno prefiere la persuasión a la coerción cuando sea posible.
Aquí está el famoso testimonio de Gandhi sobre la primacía de Satyagraha:
“El mundo descansado sobre la base sólida de satya o verdad. Asatya, que significa no-verdad, también significa inexistente, y satya o verdad también significa aquello que es. Si la no-verdad no existe, su victoria puede descartarse. Y la verdad perdurará siendo aquello que nunca puede destruirse. Esta es la doctrina de Satyagraha en resumen.”