Términos glosarios N-Z
La Noviolencia Estratégica
Este concepto, a veces descrito ahora como no-violencia, se refiere a la clase de compromiso que aborda a la no-violencia como una estrategia, que se adoptará sólo porque se piensa que es más probable que funcione que la violencia, o porque la violencia no es una posibilidad práctica. Quienes adoptan la no-violencia de esta manera a menudo se reservan el derecho a volver a la violencia si no cobran éxito, y algunos teóricos creen que esto limita su eficacia.
La noviolencia estratégica es generalmente una mejor opción y con frecuencia requiere más coraje que la violencia. Puede causar problemas, sin embargo, si la gente piensa que es la única forma de noviolencia. Pensado de este modo, si no “funciona,” no les queda más remedio que la violencia (o sumisión), mientras que la noviolencia fundamentada en principios no sólo es más eficaz en el corto plazo, sino que puede mover a la humanidad hacia un nuevo paradigma, ya que implica otro orden de creencia sobre la naturaleza y relaciones humanas.
La no-violencia estratégica, por ejemplo, todavía presupone que los medios justifican los fines, mientras que para Gandhi, “los medios son fines en construcción.” (regresa al indice del glosario)
La Noviolencia de Principios
La noviolencia de principios es la noviolencia de los que sienten que es una vocación, a diferencia de noviolencia estratégica. En este punto de vista, no es meramente una estrategia, ni el recurso de los débiles, sino una fuerza positiva que no se manifiesta en todo su potencial hasta que se adopte en principio. A menudo, los que la practican consideran que expresan algo fundamental acerca de la naturaleza humana, sobre quiénes desean convertirse como individuos o como pueblo.
Adoptar la no violencia de principios no es una decisión fácil y rápida que se puede hacer a través de la lógica, sino es lenta y quizá requiera un esfuerzo de por vida. Sin embargo, nos centramos en este tipo de violencia porque creemos que tiene el potencial para la creación, el cambio permanente a largo plazo, en última instancia, para la reconstrucción de muchas de nuestras instituciones con un fundamento más humano y sostenible. La no-violencia a largo plazo es, como decía Gandhi, un “experimento con la verdad.” Tenemos que darle un intento a este experimento de la manera que nos parezca más adecuada, y al final, el mundo necesitará de nuestras experiencias para alcanzar el nuevo orden que todos deseamos.
Probablemente la lección más importante que hemos aprendido desde – y de – Gandhi, es que la noviolencia es una fuerza positiva. Es una forma de alterar las situaciones de violencia y de influir en los demás a través de la persuasión en lugar de la coerción, la forma de resolver las diferencias de manera que todas las partes involucradas crezcan como seres humanos en el proceso, y así ser más abiertos y menos cerrados los unos con los otros.
Casi todo mundo hoy en día está familiarizado con el principio de “el fin no justifica los medios.” Este es el reconocimiento que diferencia un esfuerzo basado en la no violencia de principios, el cual es un proceso de aprendizaje mutuo para el cambio que nace de una lucha de poder. “Los medios son fines en construcción,” Gandhi explicó, lo que significa que el tipo de medios que utilizamos – violento o no violento, con secretos o transparencia, democrático o autoritario, engañoso o veraz – ya están construyendo los cimientos de la sociedad en la que queremos vivir. Mientras que algunos dirían que los medios son sólo medios hacia un fin, para el actor no violento de principios lo son, él dijo, “todo.” En el caso de una lucha revolucionaria, por ejemplo, sostuvo que “la revolución violenta traerá swaraj (independencia) violenta.” El ganador del Premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel fue igual de contundente: “La acción no violenta implanta, mediante la anticipación dentro del propio proceso de cambio en sí mismo, los valores a los que en última instancia nos conducirá … no siembra paz por medio de la guerra.” (regresa al indice del glosario)
El Pacifismo Radical
Se refiere a un movimiento no violento de objetores en particular en los EEUU en la década de 1940 y 50 – en su mayoría de las iglesias cristianas de la paz y también influenciado por Gandhi – que se negó a luchar en cualquier guerra y que tomó medidas activas para socavar el sistema de guerra. El pacifismo radical comenzó como una oposición a la Segunda Guerra Mundial, cuando AJ Muste, David Dellinger, John Yoder y otros, se negaron a luchar en “la guerra buena.” Algunos objetores creyeron que era aceptable participar en un cuerpo de ambulancias, pero otros se negaron a participar en cualquier modo en el sistema de guerra y en su lugar solicitaron un regimiento de servicio alternativo, que consistía en ser detenidos por un tiempo indefinido, sin goce de sueldo, en campos especiales que les proporcionaban una existencia miserable y trabajos forzados sin sentido. Algunos se negaron a cumplir incluso con la obligación de inscribirse en dicho proyecto, y eligieron la cárcel por encima del llamado “servicio alternativo.” Durante su estancia en la cárcel, Dellinger y otros tuvieron éxito en una huelga que resultó en la desagregación de sus años de prisión antes de la aparición del Movimiento de los Derechos Civiles. También trabajaron para reformar el sistema hospitalario psiquiátrico deshumanizante. Los participantes de estos experimentos no violentos tempranos, pasaron a aplicar su considerable experiencia en el Movimiento por los Derechos Civiles, por ejemplo con la Jornada de Reconciliación de 1947, un precursor y plantilla para los Paseos de Libertad de los 1960, al convertirse en miembros fundadores del núcleo influyente Congreso de Igualdad Racial, y asumiendo otros roles de liderazgo en el movimiento. Más tarde, los pacifistas radicales tomaron medidas en contra de la guerra de Vietnam y “bordearon” la línea de la no violencia con algunas formas de destrucción de la propiedad (la quema de archivos de reclutamiento). (regresa al indice del glosario)
La Paradoja de la Represión
Cuando la represión se torna tan opresiva que forja su propia desaparición, llegamos a la paradoja: el uso de la represión violenta puede contribuir a la inestabilidad del régimen que la patrocina.
La represión es una fuerza invasora que tiene el potencial para ocupar cada rincón del espacio cívico y político. Se trata de un sistema completo, cuyas normas, mandatos y costumbres pueden corroer e incluso dominar casi todas las facetas de la existencia humana. Aquí yace una debilidad evidente: los sistemas represivos sólo pueden convertirse en dominantes, y eventualmente, tan insoportables como para provocar una mayor resistencia en su contra. Como señala el profesor Michael Nagler:
“Una vez el estado se compromete a posturas represivas, tendrá que intensificar la violencia y represión con el fin de mantenerlo, y en algún momento la represión alcanzará un nivel intolerable.”
En el contexto de una lucha no violencia, la Paradoja de la Represión a menudo ocurre cuando un régimen reprime a un movimiento no violento, y como resultado, el movimiento no violento adquiere fuerza mientras más civiles se reúnen en pro de su causa. Por ejemplo, la campaña de Gandhi por los derechos civiles hindúes en Sudáfrica cobró un impulso exponencial cuando el régimen aprobó leyes anti-indias deshumanizantes, conocidas como la Ley de Registro Asiático o el Acta Negra en 1907.
Es importante tener en cuenta que la represión no siempre debilita la postura del estado. La dedicación y cuidadosa estrategia de los actores en el movimiento deben ser suficientes para que la represión rebote con éxito. Después de la masacre de Sharpeville cometida por el estado en contra de los civiles en 1960, el movimiento anti-apartheid en Sudáfrica perdió gran parte de su impulso y fuertemente abandonó la no-violencia. Mientras los actores no violentos anticipen mayor represión, elaboren estrategias cuidadosas, y soporten el castigo, más seguramente la paradoja cobrará existencia. (El uso exitoso de la paradoja para aumentar la fuerza de un movimiento no violento también ha sido denominado “jiu-jitsu político.”) (regresa al indice del glosario)
Permacultura
La permacultura es definida en Wikipedia como “un enfoque para el diseño de asentamientos humanos y sistemas agrícolas que imita las relaciones encontradas en las ecologías naturales.” Es un sentido de biomimetismo especial: un sistema ecológico con base en un modelo de sinergia natural, donde se mantiene una armonía entre la producción de alimentos, el cuidado del hábitat humano, y el cultivo de la tierra.
La permacultura es una ética social humana tanto ecológica como pragmática. Es ecológica en la medida en que su objetivo es la preservación de nuestro entorno natural a través del cultivo de la atención y el respeto por el delicado equilibrio de la naturaleza y, a la vez, es una ética pragmática, dado que fomenta y genera relaciones de cooperación entre las personas, así como entre estas y la tierra. (El término originalmente significaba “agricultura permanente,” pero ha llegado a significar “cultura permanente.”) Algunas actividades incluidas en la permacultura son la recogida de aguas pluviales, la creación de huertos locales con plantas perennes, y la negación de usar la tierra para crear cultivos comerciales que no hacen nada por nutrir la vida comunal.
La permacultura es una solución no violenta a la crisis de alimentos y la escasez de recursos que amenaza la continua extinción del experimento humano que prospera en el planeta. A medida que más conflictos se producen alrededor del mundo a causa de la pobreza y escasez de recursos, la permacultura es cada vez más el locus de una solución no-violenta. En la medida en la que puede aportar la independencia de la globalización, la permacultura es a menudo una forma de apoyar swaraj (autogobierno) a través del swadeshi (localismo). (regresa al indice del glosario)
Phalam
Literalmente “fruto”, phalam es una palabra usada en el Bhágavad Guitá para describir las ganancias personales adquiridas como resultado de la acción humana. De acuerdo a la teoría de acción Gita, uno debe aspirar a desapegarse de estos frutos, es decir, aprender a actuar sin egoísmo y de acuerdo al deber personal y no a la ganancia personal. (regresa al indice del glosario)
El Poder de Amenaza
El poder de amenaza es una de las tres fuerzas identificadas por Kenneth Boulding, un teórico de la paz y economista, que pueden desempeñar un papel en la interacción humana. Subyaciendo al Poder de Amenaza existe una simple ecuación: “A menos que usted haga y se rinda a X, yo haré Y.” ‘Y’ en este contexto casi siempre involucra violencia, ya sea física, emocional, psicológica o estructural. El poder de amenaza ha cobrado una prominencia trágica en nuestra cultura. Las acciones diplomáticas de la mayoría de países industrializados, por ejemplo, operan bajo el supuesto del Poder de la Amenaza. (regresa al indice del glosario)
Poder de Intercambio
En términos del abordaje al conflicto, Boulding, y más recientemente, Johan Galtung, han observado que el Poder de Intercambio frecuentemente sólo pospone el conflicto, ofreciendo a cambio un “compromiso” donde ninguna de las partes está satisfecha, pero suficientemente contenta para dejar el tema por el momento. (regresa al indice del glosario)
Poder de Persona
Término acuñado por Michael Nagler para describir la energía central en el corazón de cualquier movimiento social no violento. La no violencia comienza con la conversión de un individuo de una unidad negativa hacia una unidad positiva. Cuando una persona transforma el miedo, la ira y la agresión, en amor universal, compasión y capacidad de recuperación, nace la no violencia. A pesar de que dos millones de personas se encontraban en las calles de Manila durante el movimiento del Poder Popular Filipino, en última instancia, el movimiento consistía en “dos millones de decisiones individuales” de acuerdo al Cardenal Jaime Sin. Los estudiosos de la estrategia no violenta, como Gene Sharp, tienden a pensar en el poder de persona como el factor clave – lleva a suficiente gente a la calle y todo es posible. (La falta de disciplina puede resultar en una mentalidad de masa inútil conocida como la efervescencia de la multitud.) El término poder de persona fue acuñado para explicar el hecho de que el término popular “poder del pueblo” se centra en los números e implícitamente no reconoce la importancia del individuo en la revelación de la verdad no violenta. Ambos términos son contrastados con – y, a menudo se contraponen a – el poder del Estado. (regresa al indice del glosario)
Poder Integrativo
El poder integrativo es la tercera y menos comprendida de las “tres caras del poder” del teórico de la paz y economista Kenneth Boulding. El poder Integrativo puede articularse así: “Voy a tomar medidas positivas para representar la verdad como la percibo, y tengo fe de que en el proceso nos acercaremos en nuestra relación.” Boulding arguyó que ni el Poder de Amenaza ni el Poder de Intercambio producen paz duradera. En cambio, Boulding sostenía que el Poder Integrativo llama a que cada parte siga lo que percibe como cierto, manteniendo una mente abierta, y que confíen que esta interacción producirá un resultado que mutuamente respetuoso de la dignidad y las necesidades humanas de todas las partes. El Poder Integrativo es la no violencia basada en principios en acción. (regresa al indice del glosario)
La Primera Ley de Boulding
Un término acuñado por Kenneth E. Boulding – economista, poeta, pionero de la investigación de la paz y el esposo de la famosa socióloga de la paz y autora venerada Elise Boulding, en su clásico texto de 1972, La Paz Estable. La ‘ley’ ligeramente irónica postula:
“Si algo existe, entonces debe ser posible.”
La intención es señalar la desestimación ocasional de las posibilidades de paz incluso cuando ya han ocurrido. Por ejemplo, muchos rutinariamente argumentan que la no-violencia “nunca hubiera funcionado con los Nazis” aunque lo hizo con brillantez la única vez que se sabe que se intentó usar en una amplia escala, es decir, en la demostración de la prisión de Rosenstrasse de 1943.
El Presente de 200 años
Acuñado por la investigadora pionera de la paz y socióloga Elise Boulding, “El Presente de 200 años” significa pensar en el momento presente fugaz con plena conciencia de los efectos a futuro de nuestras acciones presentes. Si se toma en cuenta la vida útil de la persona más anciana y la persona más joven con vida en un momento dado, resulta un periodo – a través del “pasado,” “presente” y futuro – de aproximadamente 200 años. Esta perspectiva alienta un compromiso a largo plazo, para toda la vida, en el que reconocemos que el pasado todavía está con nosotros en sus efectos y que todos los aspectos del momento presente – todos nuestros pensamientos y acciones – determinarán el futuro.
Cuando Martin Luther King Jr. nos advirtió a “comenzar rápidamente la transición de una cultura de cosas a una cutura orientada hacia las personas,” coincidió con la esencia de la presente conciencia de 200 años, que nos exige pasar de la concepción materialista del ser humano a una visión basada en la conciencia que abarca la unidad de la vida a través del tiempo. (regresa al indice del glosario)
Psicología Positiva
Este término se refiere al estudio científico de las emociones y los estados mentales que contribuyen a la empatía y comunidad humana, contrario a un énfasis limitado en las enfermedades y disfunciones mentales que han prevalecido en la psicología al igual que en muchas ramas de las ciencias sociales. (regresa al indice del glosario)
Público de Referencia
“Público de referencia” es un término utilizado para describir a aquellos que sostienen sus posturas sobre una situación dada influenciados por experimentar una lucha no-violenta; es particularmente utilizado en relación a la paradoja de la opresión. (regresa al indice del glosario)
Rehumanización
Un creciente y abundante cuerpo de evidencia científica nos permite afirmar que la condición natural de los seres humanos incluye, principalmente, una gran capacidad para la empatía y de identificación mutua. Los seres humanos pueden, sin embargo, mentalmente “deshumanizar” a otros, es decir, negar que el otro también sea humano y este proceso, que un científico ha denominado “seudo-especiación,” es una peligrosa condición habilitadora de la violencia. Una de las grandes fortalezas de la no-violencia, por el contrario, es que nos humanizamos y dignificamos a nosotros mismos, y aquellos a quienes se lo ofrecemos, lo cual conlleva a recuperar nuestro sentido natural de identidad del uno con el otro en el proceso. Esto refuerza la creencia de muchos defensores de la no-violencia que la capacidad de ofrecer la no-violencia es una parte esencial de lo que nos hace humanos. (Los animales pueden llevar a cabo ciertas prácticas para la evitación del conflicto que podrían etiquetarse como no-violentas, pero se asume que es por instinto y no por voluntad propia.)
Las guerras simplemente no pueden ser llevadas a cabo sin la deshumanización generalizada del “enemigo”; llamándolos animales de un tipo u otro es una forma común de llevar a cabo esta forma de deshumanización, pero incluso etiquetar a las personas (‘rojos,’ ‘terroristas’) puede deshumanizarlos hasta cierto grado. Por lo tanto, resistir esta tendencia hacia deshumanizar a los otros es un mecanismo potente para la paz. Uli Derickson, la azafata que salvó el vuelo 847 de TWA, hablando con calma a los dos hombres árabes armados dijo, “Sin importar la dificultad, siempre los vi como seres humanos. Si no lo haces, es mejor rendirte.”
La rehumanización es una parte indispensable de la caja de herramientas no-violenta. Exige una mente creativa, paciencia duradera y un corazón abierto. Cuando rehumanizamos, estamos reforzando nuestra fe en el potencial inherente humano, además de fortalecer nuestra capacidad de persuadir con fuerza de alma (es decir, considerando al opositor como completamente humano y en paralelo resistir su agenda injusta). (regresa al indice del glosario)
Renunciación
El término sánscrito aparigraha, o “no-sujetarse”, era uno de los principios cardinales de Gandhi para los residentes de sus ashrams. Esta actitud de renunciar el apego personal hacia cualquier cosa – un objeto, otra persona, incluso una idea u opinión – es central para el dominio propio, y también una clave espiritual que conlleva hacia la libertad de la coerción de los demás. Si deseas algo para ti mismo (y no algo para todos, tú mismo incluido), ese deseo te controlará, y los demás podrán controlarte al amenazar privarte del objeto de tu deseo o al quitártelo. Si renuncias al deseo, abres tu propia capacidad de actuar en libertad, incluyendo la capacidad de actuar de manera no-violenta. Esta dinámica puede parafrasearse como, “pregúntate qué tienen en tu contra, renúncialo, y serás libre.” Como ejemplo, cuando Daniel Ellsberg estaba decidiendo qué hacer con los papeles del pentágono, primero se paralizó al pensar en la noción de hacerlos públicos. Alcanzó un punto en el que se preguntó, “Si estuviese dispuesto a ir a la cárcel,” (es decir, dispuesto a renunciar su libertad personal) “¿qué podría hacer?” Se percató entonces que así sería libre de publicar los documentos, lo cual hizo. En su extremo, si renuncias al apego a tu cuerpo físico, la amenaza de la violencia pierde su poder. Para citar a Albert Szent-Gyeorgyi, “Gandhi enseñó al mundo que existen cosas por encima de la violencia, más elevadas incluso que la vida misma; demostró que la fuerza había perdido su poder sugestivo.”
La renunciación también permite que vivamos de manera simple en el plano material, lo cual quita el peso de la escasez a nuestros compañeros en este mundo. (regresa al indice del glosario)
Sanación Colateral
Un término acuñado por Michael Nagler para postular un paralelo al eufemismo “daños colaterales” usados por la milicia para referirse a (mientras que implícitamente niega la tragedia de) los civiles que son asesinados o lastimados en los crecientes números de conflictos armados – incluso por bombas “inteligentes.”
La sanación colateral se refiere al hecho de que, ya que la no-violencia inyecta energía positiva en una situación, siempre producirá efectos positivos de algún tipo en algún lado y de algún modo. Al igual que su contraparte destructiva, no podemos siempre saber exactamente cuáles serán estos resultados. Contrario al daño colateral, sin embargo, podemos contar con el hecho de que dichos resultados siempre serán constructivos.
Cuando 35,000 estadounidenses enviaron un mensaje a La Casa Blanca de “alimenta a tu enemigo” cuando existía hambruna severa en China durante la Guerra de Corea no hubo respuesta. Fue revelado mucho después, sin embargo, que esos 35,000 mensajes permitieron que el Presidente Eisenhower negara una petición por parte de la Jefatura del Estado Mayor para comenzar un bombardeo más allá del río Yalu, es decir, en China propiamente – un acto que pudo haber iniciado la Tercera Guerra Mundial.
Durante la larga campaña llevada a cabo por la aldea de Budrus en la Ribera Occidental, surgió una armonía maravillosa dentro de distintos elementos dispares comunales como resultado del ideal de la lucha no-violenta. En este caso, la campaña también cobró éxito con respecto a sus metas.
En otras palabras, aunque una acción no-violenta “triunfe” o “falle” en el corto plazo con respecto a sus metas explícitas, siempre induce cambios positivos, o “sanación colateral.” (regresa al indice del glosario)
Satyagraha
Satyagraha puede entenderse como la gran fuerza interior necesaria para llevar a cabo actos no-violentos. Gandhi acuñó la palabra Satyagraha en 1908, significando “aferrarse a la verdad” (en sánscrito) y en referencia a las campañas organizadas de Gandhi en Africa del Sur y la India, tal como la famosa marcha Sal Satyagraha de 1930. Gandhi nunca definió la no violencia como resistencia pasiva porque no percibía nada pasivo en su quehacer. El creía que cualquiera que se adhiera a la resistencia no violenta que trabajara para defender una causa justa, inevitablemente llegará al corazón del opresor, tomando medidas auténticas para representar la verdad. Cuando se entiende mediante su fuerza y coraje, la Satyagraha-también definida como ‘poder de alma’-se reconoce como una forma de resistencia positiva y basada en la espiritualidad que tiene su inicio en el corazón de quien resiste e inevitablemente produce acción creativa.
El término su utiliza hoy para significar tanto (1) el principio general de “aferrarse a la verdad,” donde es el equivalente de “no-violencia,” y (2) la resistencia directa en la forma de un Programa de Obstrucción (como en los ejemplos anteriormente citados). Sus practicantes son conocidos como satyagrahis. (regresa al indice del glosario)
Satyagrahi
Un satyagrahi es una persona que se ha dedicado a la verdad (sat o satya), o más específicamente aquel que ofrece satyagraha, o participe en una campaña satyagraha.
Los requisitos establecidos por Gandhi para sus satyagrahis incluyen:
Él o ella tienen un firme compromiso con la no-violencia, la sencillez, la honestidad, la castidad, y la auto-disciplina en pensamiento, palabra y obra.
Él o ella sostiene con firmeza (el significado de ‘graha’) a la verdad, en particular, que toda forma de vida está interconectada, rechazando la violencia en cualquier forma, incluyendo la humillación de los opositores, aceptar la humillación propia, o la violencia hacia uno mismo implicada en el uso de sustancias intoxicantes.
Él o ella siempre están dispuestos a renunciar a las comodidades materiales para el bien de todos los seres, contando siempre con la fuerza del alma, cuando sea necesario, para resistir la conducta del otro.
Los satyagrahi siempre deben ejercer la confianza del oponente (es decir, la confianza que él o ella puede despertarse hacia la compasión), y cultivar una fe inquebrantable en la bondad de la humanidad, separando constantemente a la persona de la acción. (regresa al indice del glosario)
Seguridad Alternativa
El concepto tradicional de seguridad nacional se remonta a 1648, en la formalización del Tratado de Westfalia del estado-nación (o, como algunos dirían, el ‘estado de seguridad nacional’) en Europa. Define la ‘seguridad’ de manera estrecha, ya que la disuasión de la amenaza militar y, lo más dañino de todo, ‘compra’ la seguridad que posee a costa de otros: un modelo costoso “suma cero.” Así pues, tenemos una “palabra de moda,” usada para justificar un sinfín de sacrificios de derechos democráticos, con, a lo sumo, un resultado inestable y poco satisfactorio.
En los últimos años, una serie de alternativas han surgido para remplazar ese concepto estrecho y anticuado. Hay seguridad humana, y que el referente apropiado para la seguridad debe ser el individuo y no el estado; la seguridad total, dirigida a la protección no sólo de ataques militares sino a través de suficiencia alimentaria, de ropa, asistencia sanitaria, vivienda y todas las necesidades de una vida digna para todos; y tal vez lo más importante es la seguridad común, que reconoce que la única manera de que una nación o individuo estén verdaderamente seguros es con otros, no en contra de otros. La seguridad común consiste en reconocer que la seguridad de una nación es determinado por la seguridad de todos, incluyendo los derechos fundamentales a la protección y a la seguridad de todas las naciones, incluso la de los antagonistas políticos (estados miembros de la Unión Europea han revocado la pena de muerte para promover los derechos fundamentales de todos.)
Las prácticas de seguridad comunes tienen su origen en la cooperación y la confianza entre las naciones, incluyendo los programas de intercambio cultural y los incentivos económicos, con un énfasis en la reducción de armas y el desarme nuclear. El concepto tradicional de “seguridad” se basa en el poder de la amenaza, mientras que estas alternativas se basan en el poder de la integración: en pocas palabras, son no-violentas en su concepción.
“Seguridad alternativa” es un término general para referirse a estos enfoques complementarios. (regresa al indice del glosario)
Seguridad Común
El concepto, muy acorde con la visión de mundo no violenta, que un estado – o incluso cualquier persona o grupo – no pueden alcanzar seguridad sin que los otros estados o individuos en cuestión gocen de seguridad al mismo tiempo. En el punto de vista de seguridad común, un opositor que es incapaz de atacar puede proporcionarte cierto nivel de seguridad, pero un antiguo opositor que no desea atacar desde un principio te da un sentido de seguridad más significativo, profundo y fiable. Es la seguridad mucho más profunda que conlleva el no tener enemigos, contraria a la del concepto convencional de mantener a los enemigos bajo control. Esto forma, por supuesto, parte del enfoque de suma positiva para abordar el conflicto tan característico de la no violencia. Se puede comparar con la observación de Emma Goldman de que “la libertad de cada quien tiene sus raíces en la libertad de todos.” Junto con la seguridad total, constituye en el enfoque no violento la necesidad universal de tener seguridad. (regresa al indice del glosario)
Seguridad Total
También llamada “seguridad humana”: el concepto de que la verdadera seguridad de un Estado (o persona, o grupo) implica mucho más que la ausencia de miedo al ataque. Como la palestina Hannan Ashrawi ha señalado, “…ellos (el Gobierno israelí) definen la seguridad sólo de manera militar. Nosotros definimos la seguridad como seguridad humana – no sólo personal, sino territorial, económica, geográfica, histórica, de identidad, existencial – hay diferentes tipos y aspectos de la seguridad humana.” Junto con la seguridad común de este concepto, se constituye el concepto de seguridad de la visión de mundo o paradigma no-violento. (regresa al indice del glosario)
Swadeshi
La palabra Swadeshi deriva del sánscrito y es una conjunción de dos palabras en sánscrito. Swa significa “sí” o “propio” y Desh se entiende como “país,” por lo que Swadesh significaría “país propio,” y Swadeshi, la forma adjetival, significaría “de su propio país,” pero podría traducirse libremente en la mayoría de contextos como “auto-suficiencia.”
Como muchos de los términos empleados por Gandhi, tiene a la vez un significado psicológico interno, y un significado secundario en el contexto más orientado hacia el exterior. En el sentido psicológico, swadeshi es el principio de que uno actúa desde una posición de fuerza si uno se centra en la solución de los propios problemas; se basa en las capacidades y debilidades propias. Una persona no puede resolver los problemas de otra persona o recomendar a otra persona hacer algo que no han hecho por sí mismos.
En el otro sentido, el uso más común, swadeshi es el énfasis en la actuación dentro y desde la propia comunidad, tanto en lo político y como consumidor.
En otras palabras, es el localismo y la autosuficiencia, pero al mismo tiempo es la interdependencia y, en la época de Gandhi, finalmente condujo hacia la independencia (swaraj), dado que el control británico de la India se basaba en el control de sus industrias autóctonas. Desde la perspectiva de Gandhi, swadeshi era la clave para la independencia de la india, y fue representado por el charkha y la rueca, el “centro del sistema solar” del programa constructivo de Gandhi. Él dijo:
“La forma más limpia y popular de Swadeshi es la estimulación el hilado a mano y el tejido para lograr una distribución juiciosa del hilo y tela que ha de fabricarse…Swadeshi es un principio eterno cuya negligencia ha traído dolor incalculable a la humanidad. Significa la producción y distribución de los artículos fabricados en el propio país…Swadeshi es una programa constructivo.”
“Swadeshi es nuestro espíritu, que nos restringe al uso y servicio de nuestro entorno más inmediato excluyendo lo remoto…. En el campo de la política, que debería hacer uso de las instituciones indígenas y servirles mediante la curación de sus defectos comprobados. En el de la economía, debo utilizar sólo las cosas que son producidas por mis vecinos inmediatos y servir a estas industrias haciéndolas eficientes y completarlas sus áreas de carencia. Se sugiere que dichos Swadeshi, si son llevados a la práctica, llevarán al milenio, porque no esperamos alcanzarlo en nuestros tiempos, por lo cual no debemos abandonar el Swadeshi a pesar de que no pueda ser alcanzado plenamente en las generaciones venideras.”
Parece que la predicción de Gandhi se está convirtiendo en una realidad. Swadeshi es lo que el movimiento progresista del siglo XXI está denominando: piensa globalmente, actúa localmente. Swadeshi es un llamado a los consumidores a ser más conscientes de la violencia que ellos y ellas están haciendo mediante el apoyo a las industrias que provocan la pobreza y el daño a los trabajadores y hacia los seres humanos en general y otras criaturas. En un mundo que se mueve hacia la organización descentralizada, localizada, podríamos adaptar la estrategia de Gandhi, en sustitución de la producción en masa y el consumismo con la comunidad, y luego formar la comunidad de comunidades: la Comunidad de la Tierra.
Recursos: El Evangelio de Swadeshi por Mohandas K. Gandhi. (regresa al indice del glosario)
Swaraj
Swaraj es un término sánscrito antiguo, compuesto por la partícula swa (o sva) que significa “el yo propio”, y raj que significa “regla.” La autonomía o auto-control es la base para que la humanidad se libere de la influencia y control externo sobre la mente, además de ser el punto de partida para la coexistencia no-violenta en la sociedad en general. La premisa es que cuando una persona es capaz de controlar sus pensamientos y deseos, el sentido inherente de conexión o unidad será libre para actuar; él o ella espontáneamente actuará de manera que sea más beneficiosa para los demás, así como para sí mismo/a. Como la mayoría de términos clave de Gandhi, swaraj está destinado a ser aplicado en varios niveles; por lo tanto, además de la base mencionada, puede significar independencia de dominación extranjera.
Una de las obras seminales de Gandhi, Hind Swaraj, fue escrita en 1909, a bordo de un bardo desde Sudáfrica hasta la India, y publicada por primera vez en 1909 en Gujarat. Luego fue traducido al inglés, ayudando a la intención de Gandhi de que la independencia ganara impulso. En esta obra, considerada por muchos como un clásico, Gandhi describe su forma ideal de autogobierno y su deseo hacia el pueblo de la India, señalando, sin embargo, “Quiero advertir al lector que no piense que ahora estoy intentado concretar el Swaraj contemplado en esta obra. Sé que la India no posee la madurez necesaria para ello. Puede parecer impertinente decirlo, pero esa es mi convicción. Yo estoy trabajando de forma individual para la forma de auto-gobierno descrita en la obra.” El cambio, para que sea profundo y duradero, debe venir de adentro, como lo hizo, para la India, 38 años después. Swaraj es nuestro patrimonio y nuestra responsabilidad – y, de acuerdo a Gandhi, “cualquier otra regla es dominación extranjera.” (regresa al indice del glosario)
Swadharma
En la tradición hindú espiritual, dharma es “el camino,” (literalmente “ley” o “deber”), y todos y todo en la existencia tienen su propio dharma – su modo esencial de ser en este mundo – que está en armonía con el dharma antepuesto de la no-violencia que aplica a toda la vida (ahimsa paramo dharma). Por ende, el swadharma (swa=”propio,” y dharma=”deber”) es su rol único en la vida o su modo de ser en el mundo, el cual es su deber realizar y satisfacer. Puede pensarse en el dharma no como destino (lo cual negaría la realidad del libre albedrío) sino como un grupo de capacidades que nos permiten asentarnos en nuestro lugar en el mundo cuando éstas han sido completamente desarrolladas. El Gita advierte fuertemente que no debe vivirse del dharma de otra persona; descubrir las capacidades propias y utilizarlas en servicio desinteresado podrían describirse como la meta de la vida humana. (regresa al indice del glosario)
La Teoría de Acción Guitá
La Teoría de Acción Guitá, derivada del texto Indio espiritual antiguo Bhágavad-guitá, podría describirse como el resumen del abordaje de Gandhi hacia la acción no-violenta. La fórmula básica para la acción desinteresada es: elegir la meta correcta, usar los medios correctos y dejar los resultados a la voluntad de Dios. Es decir, elegir la meta correcta (unidad, o reconciliación, en lugar de “ganarle” o derrotar a cualquier persona), usar los medios correctos (la no-violencia) y desapegarse de los resultados. Gandhi una vez parafraseó elocuentemente esta fórmula cuando le respondió a un cuáquero inglés que se quejaba de ser ignorado por los medios de comunicación, “Tira la piedra correcta al pozo correcto, y dejad que las ondas se cuiden de sí mismas.” (regresa al indice del glosario)
“Trabajo” versus trabajo
La distinción entre “trabajo” y trabajo es necesaria para hacer hincapié en el hecho de que los resultados beneficioso de la acción no violenta a menudo yace en el futuro. “Trabajo” se refiere a los resultados obvios e inmediatos, mientras que el trabajo sin comillas designa el resultado y los cambios fundamentales provocados por la no violencia. En otras palabras, significa “hizo un buen trabajo” y no “consiguió lo que quería.” Toda acción tiene consecuencias en distintos niveles; un agente no violento siempre toma en cuenta los objetivos y consecuencias a largo plazo en distintos niveles y no sólo los resultados visibles y convenientes de manera inmediata. Debido al hecho de que la no violencia puede demorarse en el abordaje de las causas fundamentales de la violencia o la injusticia, aquellos que buscan alcanzar objetivos inmediatos frecuentemente la rechazan basándose en el argumento de que la no violencia no “funciona.” A menudo adoptan la violencia porque satisface una necesidad inmediata, ignorando las consecuencias adversas a largo plazo, y en consecuencia moviéndose de crisis en crisis en lugar de mejorar las cosas.
Se puede tipificar la diferencia del siguiente modo:
La violencia algunas veces “funciona” pero un nunca funciona; mientras que la no violencia algunas veces “funciona” y siempre funciona.
Un ejemplo clásico de dicha diferencia es visible en la Satyagraha liderada por Gandhi en 1930. A pesar del sufrimiento que causó, la campaña no cobró éxito en cambiar las tan despreciadas leyes de sal – más sin embargo ha sido identificada por historiadores como el punto de inflexión que conllevó a la independencia de la India 17 años después. (regresa al indice del glosario)
Los Tres Gunas
La tradición yoghi habla de tres estados energéticos en el mundo fenomenológico, tamas, rajas y sattva. Tamas es el estado de apatía e inacción, rajas el de excitación y actividad, y sattva significa ‘ley’ o ‘balance’, un estado en el cual el desapego y la acción no-egoísta son posibles. Tamas por consiguiente estaría asociado con una persona o grupo que responden a la opresión con apatía, inercia y una sensación de impotencia. Rajas correspondería con el estado en el que las pasiones de las personas han sido excitadas y en el cual la acción (aunque posiblemente violenta) es posible, pero en el cual no hay necesariamente una meta o camino claro y coherente. (Ver también “efervescencia del grupo.”) Sattva es el estado desde el cual la acción no-violenta, la acción creativa hacia una mayor integración, unidad y reconciliación (no debe confundirse esto con acción meramente carente de violencia) se posibilita. Estas tres amplias leyes de la realidad se alinean sugerentemente con los estados espirituales de la cobardía, violencia y no-violencia. Por ejemplo, se piensa que no es posible moverse directamente de un estado tamas a un estado sattva, sin pasar a través del estado raja. Esto algunas veces es usado para explicar por qué en algunos movimientos no-violentos sociales, el grupo oprimido debe sobrellevar la creencia que son impotentes o que de algún modo “se lo merecen” (opresión internalizada), y deben pasar por una fase donde son capaces de ser violentos (no necesariamente deben aplicarla) en su camino hacia convertirse un movimiento no-violento. Como Gandhi dijo, “puedo hacer un satyagrahi de una persona violenta, no de un cobarde” (regresa al indice del glosario)
Unidad de Corazón
Este pilar importante en el sistema de Gandhi sostiene la visión de un orden de una unidad dentro de la diversidad en el cual la unidad es reconocida y celebrada en el nivel del ‘corazón’ mientras que la diversidad es igualmente celebrada en la superficie, en diferencias de raza, género, visión de mundo, incluso de estatus, riqueza y poder (uno de los criterios que diferencian el sistema espiritualmente fundamentado de la no-violencia con abordajes más políticamente inclinados a la justicia que intentan lograr unidad nivelando dichas diferencias superficiales). En términos prácticos, uno logra la unidad de corazón con, o por lo menos hacia otro, cuando uno espontáneamente desea la satisfacción y felicidad del otro independiente o, parcialmente debido a, cualquier diferencia superficial. Subyaciendo a este estado mental se encuentra la creencia que de hecho existe una solución a todos los problemas que satisface las necesidades reales (y no los deseos condicionados) de todas las partes; o, como dijo Martin Luther King:
“No puedo ser lo que debo ser si tú no eres lo que debes ser, y tú no puedes ser lo que debes ser sino soy lo que debo ser.”
En el modelo del Ciclo de la No-violencia desarrollado por Michael Nagler, la unidad de corazón es el antídoto directo del racismo, y también la actitud subyacente para todo Satyagraha. (regresa al indice del glosario)
Vegetarianismo
Muchos piensan que la verdadera no-violencia no puede limitarse a la comunidad humana y en efecto distintos filósofos del Antiguo mundo, griegos y romanos, señalaron que la crueldad hacia los animales sólo era un preludio o factor habilitante para la crueldad hacia los humanos.
Gandhi, que fue vegetariano toda su vida (con algunos lapsos adolescentes) incluso pensaba que “toda la ciencia basada en el sufrimiento de los inocentes no es consecuente” (un tema luego abordado por muchos ahora que remplazaría, por ejemplo, la disección de animales con simulación computarizada.)
Para Gandhi, el “control del paladar es una ayuda invaluable para el control de la mente,” y efectivamente muchos que abogan por el vegetarianismo citan problemáticas de costo, ecología (se requieren veinte veces más proteínas si son conseguidas de una animal que si son extraídas directamente de una planta) y muchas otras junto a la problemática fundamental del evitar la crueldad.
Desafortunadamente, la búsqueda por los derechos animales no siempre es llevada a cabo a través de medidas no-violentas (del mismo modo que, en la India, Gandhi tuvo que condenar la matanza de musulmanes debido a su matanza de vacas). (regresa al indice del glosario)
Vedanta
El vedanta, dentro de otros significados, es la visión de mundo que subyace todos los sistemas de la filosofía India. Una fuente primaria de esta visión son las Upanishad (las Upanishad son entregadas tradicionalmente al finalizar los Vedas, y Vedanta significa “fin de los Vedas.”) Este fundamento del pensar espiritual Indio, con su insistencia en la unidad de la vida subyacente (y la posibilidad de realizar dicha unidad a través de, p. ej., el servicio desinteresado de todos) fue la base para el abordaje de Gandhi hacia la espiritualidad y la no-violencia. En una Upanishad, por ejemplo (el Brihadaranyika, I. 1. 14) nos dicen que “mediante este dharma incluso el hombre débil puede prevalecer sobre un rey.” En el Chandogya (VIII. 1.5) leemos que “aquí (en este mundo) la gente hace lo que se les ordena, entonces se convierten dependientes en…los deseos de otros,… y sus obras no llevan a nada, ya sea en este mundo o en el siguiente.” (regresa al indice del glosario)
Violencia Estructural
El término violencia estructural fue acuñado por Johan Galtung para articular el lado oculto de la violencia que nos rodea que está integrado en la estructura de la sociedad misma y por tanto es más difícil de identificar y erradicar. Esto causa mucho sufrimiento y puede llevar a un conflicto, la guerra y el genocidio. Si bien la violencia física directa recibe mayor atención, la injusticia que está integrada en casi todos los sistemas sociales puede causar un daño igual o mayor.
Como dijo Gandhi, “Poco me importa si usted dispara un hombre y lo mata o lo deja morirse de hambre.”
La violencia estructural es parte del sistema. Por otra parte, es mucho más fácil para los que la han creado y los que se benefician de las estructuras injustas, ignorar lo que han hecho a no ser que más o menos se les obligue a hacerlo – una especie de despertar que es a menudo el trabajo de las fuerzas no-violentas. La pobreza, por ejemplo, es una manifestación de un sistema de clases violento. La autora Bell Hooks describe la intersección de las estructuras institucionales hegemónicas y violentas de raza, clase y género en la sociedad como la “supremacía blanca-capitalista-patriarcal.” Esta estructura opresiva enclavada es lo que queremos trascender y superar de manera no violenta.
El viejo dicho irónico que nota que “la ley es imparcial: ricos y pobres, se les prohíbe dormir debajo del puente” es un reconocimiento implícito de la violencia estructural y el poder del control de los sistemas en una sociedad para crearlo e ignorarlo. La violencia estructural es contrarrestada de manera efectiva en la mayoría de los casos por el Programa Constructivo. (regresa al indice del glosario)